En muchas zonas de Extremadura, el agua presenta un alto contenido en sales minerales, especialmente carbonato cálcico, lo que provoca lo que comúnmente conocemos como agua dura. Este exceso de cal no solo reduce la calidad del agua, sino que también daña tuberías, electrodomésticos y sistemas de calefacción. Gracias a la tecnología avanzada del Cal-X, en Humix ofrecemos una solución eficaz, ecológica y sin mantenimiento para combatir la cal desde el origen.
En Humix sabemos que el agua dura es un problema frecuente en muchas zonas de Extremadura. La acumulación de cal no solo afecta a la eficiencia de los electrodomésticos y sistemas de fontanería, sino que también puede deteriorar griferías, calderas y tuberías a largo plazo.
El descalcificador CAL-X utiliza un innovador sistema de micronización magnética que trata el agua dura sin añadir químicos ni sal. Gracias a esta tecnología, las partículas de cal se fragmentan hasta un tamaño microscópico, evitando que se adhieran a las superficies y reduciendo las indeseadas incrustaciones de cal.
Instalar CAL-X es una inversión inteligente para quienes desean un sistema eficiente, limpio y respetuoso con el medio ambiente. Además, su diseño compacto y discreto permite instalarlo fácilmente en cualquier vivienda o negocio de Extremadura.
💧 Protege tu hogar, mejora tu agua y di adiós a la cal con CAL-X.
La cal es el nombre común que recibe el carbonato cálcico, un mineral presente de forma natural en muchas fuentes de agua. Cuando el agua contiene una elevada concentración de sales de calcio y magnesio, se la denomina agua dura. Este fenómeno es habitual en diversas zonas de Extremadura, donde la composición geológica del terreno favorece la disolución de estos minerales en el agua.
La cal aparece principalmente por un proceso llamado precipitación. Cuando el agua dura se calienta o entra en contacto con ciertas superficies, el carbonato cálcico se cristaliza, formando depósitos sólidos visibles como manchas blancas o incrustaciones. Con el tiempo, estas acumulaciones afectan a grifos, electrodomésticos, tuberías y calderas, reduciendo su eficiencia y acortando su vida útil.
Además de los problemas estéticos y mecánicos, la presencia de cal puede aumentar el consumo energético y dificultar la limpieza de superficies y tejidos. Por ello, contar con un sistema antical es fundamental para proteger la instalación de agua y garantizar su durabilidad.
